
Reseña crítica y contextual
Un disco que es producto, y un producto que es provocación
Lanzado en 1986, Flaunt It es el debut de Sigue Sigue Sputnik, una banda británica tan visual como sonora, formada por Tony James (ex-Generation X) y liderada por una estética cyberpunk adelantada a su tiempo. Producción: Giorgio Moroder, lo cual ya es decir mucho.
Pero Flaunt It no es un simple álbum. Es un experimento mediático, un artefacto sonoro que explora la fusión entre el pop sintético, la estética futurista de serie B y una visión completamente cínica del capitalismo.
Concepto y estética
El disco fue concebido como si fuera una transmisión pirata desde un futuro distópico. Entre cada track hay espacios publicitarios falsos o reales, anunciando desde revistas hasta lencería japonesa. La banda incluso vendió esos espacios a marcas reales como i-D Magazine o Studio Line de L’Oréal. Todo formaba parte del discurso: “el capitalismo es cool, si lo controlamos nosotros.”
Esto no era solo provocación: era una crítica envuelta en lentejuelas. Sigue Sigue Sputnik se burlaba del sistema desde dentro del sistema, usando su imagen de cyborgs sexuales con estética de cómic y trajes de vinilo como parte de la performance.
Sonido: rock futurista en stéroide
Musicalmente, Flaunt It es un collage saturado y agresivo de:
- Synth pop
- Rockabilly digitalizado
- Electro punk
- Samples de películas (notoriamente Blade Runner y Scarface)
- Drum machines al palo y guitarras estilo sci-fi
El track más icónico:
“Love Missile F1-11” – Un himno del exceso. Saturado, acelerado, sexual y cargado de referencias sonoras. Fue un hit instantáneo. Sigue sonando a futuro retro incluso hoy.
¿Revolución o payasada?
Críticos de la época lo odiaron o lo amaron. El disco fue visto como una tomadura de pelo para algunos, una obra visionaria para otros. Lo cierto es que Sigue Sigue Sputnik anticipó la estética hacker, el glitch, el collage posmoderno y el marketing como forma de arte. Es como si Warhol hubiese hecho un álbum con Terminator y lo hubiese pasado por un VHS pirata.
Lo que no envejeció tan bien
- Algunos samples y efectos hoy suenan toscos o muy “de época”.
- El concepto publicitario puede parecer forzado o gimmick si no se entiende el contexto.
- No es un disco de escucha relajada: es un ataque frontal al sentido del buen gusto.
En resumen
Flaunt It es una bomba estética, un statement sin filtros y una obra tan adelantada a su tiempo que terminó siendo incomprendida por muchos. Es un disco que no pide permiso, no busca agradar y nunca se disculpa.
Un clásico de culto para los amantes del exceso, el caos digital y la ironía cyberpunk.